domingo, 30 de junio de 2019

Barba Azul es solo la versión sin filtros del Príncipe Azul

"If once a man indulges himself in murder, very soon he comes to think little of robbing; and from robbing he comes next to drinking and Sabbath-breaking, and from that to incivility and procrastination."

Thomas de Quincey, Murder Considered as One of the Fine Arts, 1827
No.

No y no.

No no no no no no no no no no.

¡Que no!

"You used to wrap yourself in fairy tales like a blanket, but it was the cold you loved. Sharp shivers as you uncovered the corpses of Bluebeard's wives. Sweeter goosebumps as Prince Charming slid one glass slipper over your little toes. A perfect fit."
A ver, cariños míos, esto va así: habéis perdido el vicio de leer y, como consecuencia, habéis perdido la costumbre de pensar en lo que leéis. Hasta diría que habéis perdido la costumbre de pensar, punto, pero eso podría sonar un pelín denigrante, ¿verdad?, así que me ajustaré a mi primera afirmación: habéis perdido la costumbre de leer y pensar en lo leído, así que ya no estáis familiarizadas con las sutilezas, se os escapan los matices, sois disléxicas al subtexto de una narración y ahora, como consecuencia última de todo eso, habéis adquirido el feo vicio de ser subnormales profundas incapaces de daros cuenta hasta de lo más evidente.

No, no es un romántico. Es un puto psicópata acosador, manipulador, y un asesino.

No, no es una bonita historia de amor. Es una historia de acoso, obsesión y muerte.


En septiembre pasado, Netflix puso a disposición de sus clientes YOU, una serie sobre Joe Goldberg, librero raruelo y algo palidorro, que se enamora de Guinevere Beck (interpretada por Elizabeth Lail) y hace todo lo posible por conquistarla. A Joe no le detiene que Beck ya esté en una relación y que Beck y él no tengan gran cosa en común, salvo una desmedida pasión por la literatura.
Qué romántico, ¿verdad?

A ver, niñas: en el primer capítulo, Joe busca a Beck en Facebook, la sigue hasta su casa, la acecha por la ventana, se masturba mirándola, allana su apartamento, le roba el móvil para tener acceso a sus mensajes y sus contactos y le roba unas bragas. Usadas.

En el primer capítulo.

Lo voy a repetir, por si no me habéis entendido, que habéis demostrado tener una escasa, por decir algo, comprensión narrativa, y tal vez no he sido lo bastante claro:

En el primer capítulo, Joe busca a Beck en Feisbuc, la sigue hasta su chabolo, la espía por la ventana, se hace una gayola mirándola, allana su apartamento, le sisa el móvil, para tener acceso a sus mensajes y sus contactos y le roba unas bragas. Sucias.

¿Ya?

Mira, mejor asegurarse. Lo voy a escribir una tercera vez:

En el primérido caspítuslo, el Joe busca a la Beck en el Facebú, la sigue hasta su queli, la junea por la ventana, se empajota mirándola (mientras ella se refriega un cojín en la bisectriz, pero eso no era una invitación y además estaba en su casa, le picaba el rascallú y tenía perfecto derecho a darse una alegría clitoriana, si le apetecía), se cuela en lo suyo, le manga el móvil, le ficha los mensajes y a las amigas y se larga con unas bragas suyas. Usadas.


Avisadme, ¿eh? Avisadme cuando lleguemos a la parte romántica. Porque así, en un solo párrafo, uno solito, que resume la primera media hora del capítulo piloto, yo veo a Joe cometer seis delitos, como poco.

¡Puto marrano!
"But by the schoolyard, real princesses floated by you on fall winds. You saw the gulf between you and the rich girls and vowed to stop believing in fairy tales. But the stories were in you, deep as poison. If Prince Charming was real. If he could save you. You needed to be saved from the unfairness of everything. When would he come? The answer was a cruel shrug in a hundred fleeting moments: the sneer on Steve Smith's face when he called you a fat cow, uncle Jeff's hand squeezing your ass in the Thanksgiving kitchen, the accusation in your father's eyes when you told him what happened."
En el primer capítulo Joe bla, bla, bla y la Intenné se ha llenado de comentarios de féminas a las que se les hizo el chichi gaseosa con esa bonita y romántica historia de amor entre una petarda escritora wannabe y su acosador psicópata.
(Sí. Petarda. Petarda narcisista, ensimismada y egoísta, atenta solo a su propio ombligo blanco, anglosajón y protestante de escritorzuela primeriza sin ansias ni talento, incapaz de darse cuenta, por ejemplo, de que en el capítulo seis su novio SE ABRIÓ LA PUTA CABEZA. ¿Cómo cojones, por muy obnubilada que estés, no notas que tu chico tiene una cicatriz de siete centímetros bien visible en el puto cráneo y la tapa con un parche del tamaño de una cajetilla de Ducados?)
A Penn Badgley, actor que da vida a Joe, se le están limando las huellas dactilares de tuitear, a todas estas mujeres que han visto YOU y se han convencido de que es «una hermosa historia de amor», que si se han vuelto todas locas. Casi la mitad de sus tweets van sobre este tema.

Joder, chicas, ¿estáis viendo la misma serie que yo?

Joe se carga al novio de Beck. Joe dedica veinte horas diarias a alejar a Beck de sus amigas, a las que considera una mala influencia. Joe miente, engaña, delinque, secuestra y mata para conseguir a Beck. Cuando se entera de que Beck está yendo a terapia, da por sentado que se la está pegando con el psicólogo (un John Stamos que, claramente, ha hecho un pacto con Lucifer y está en posesión del secreto de la eterna juventud) y se va a su consulta, haciéndose pasar por un paciente, con intención de matarlo.

El paranoico, tóxico y celoso Joe ha decidido que ama a Beck y que deben ser pareja, y le importa tres puntas de nabo lo que Beck tenga que decir al respecto.

¿Eso es romántico? ¡no jodas! ¿Qué mierda os pasa a todas?

"From every boy masquerading as a man that you let into your body, your heart, you learned you didn't have whatever magic turns a beast into a prince. You surrounded yourself with the girls you'd always resented, hoping to share their power, and you hated yourself. And that diminished you even more. And then, right when you thought you might just dissapear, he saw you and you knew somewhere deep it was too good to be true, but you let yourself be swept."
Las relaciones de pareja ya son lo bastante complicadas sin incurrir en dinámicas de abuso. Por ejemplo: cuando la relación entre Beck y Joe está más que consolidada (huy, perdón; espóilers), Beck comienza a sabotearla pasivamente. Ahora que tiene a Joe, no lo quiere. Llega al extremo de echarle la culpa de su bloqueo de escritora (y no, no se le ocurre siquiera la posibilidad de que tener todo el puto día el hocico metido en su teléfono móvil, mirando el Facebook de sus amigas y tuiteando chuminadas, en vez de en la pantalla de su portátil, escribiendo, pueda tener algo que ver con ello).

Pero, claro, si las comidas de olla sentimentales de Beck centrasen la acción y Joe no fuese un puto sociópata, YOU sería otro tipo de serie.

Y, por cierto, las sospechas de Joe de que Beck estaba engrasando la verga de su terapeuta estaban más que justificadas. Lo cual, huelga decirlo, no exculpa la reacción de Joe.
Oh, perdón. Eso era otro espóiler.
No es la primera vez que intentan blanquearnos a un sociópata. Mira toda la mitología construida alrededor de Aníbal Lecter o Norman Bates, tipos a los que no querrías ver ni en pintura. Y aquí ya nos hemos confesado fans de Dexter Morgan, un asesino al que, manipulados tus sentimientos por los guionistas de la serie, acabas no solo por encontrar entrañable, sino que simpatizas con su conducta, deseas que siga matando y celebras la torpeza de la Policía, incapaz de detenerle.

Joe, como Dexter, tiene su propio Harry: el señor Mooney, el (cabrón) dueño original de la librería, y un alijo de trofeos de sus víctimas; aunque me parece que aquí se acaban todas las similitudes.

"Mooney... He was my Mr. Miyagi... if Miyagi was a Soviet prison guard."
La rubia, anglosajona y lerda Beck.
Dexter planea sus crímenes a fin de no ser detenido ni dejar pruebas. A veces sus planes le salen rana, pero al menos lo intenta.

Joe se mueve por impulsos y, en situaciones de estrés, no es capaz de pensar a largo plazo. Un rasgo típico de los psicópatas.

Dexter mata asesinos a los que el Estado de Florida, de haberlos procesado, habría acabado ejecutando de todas maneras. Y, sí, sé que estoy haciendo de abogado del diablo. También yo he caído víctima de los trucos sucios de los guionistas de la serie y estoy blanqueando los crímenes de un puto asesino en serie.

Pero es que Joe mata a personas inocentes. Personas hechas polvo y con sus propias mierdas, pero básicamente inocentes.

Dexter, a su perversa e interesada manera, al satisfacer a su «oscuro pasajero» crea un Miami más seguro. Joe solo quiere obligar a Beck a amarle. Aunque tenga que asesinar a todo Nueva York para lograrlo.
La ficción puede lograr que empaticemos con personajes detestables: Drácula, Darth Vader, James Bond, Batman, Britney Spears. Los guionistas de YOU intentan vendernos que Joe, en realidad, no es tan cabrón como parece. Es el buenorro ratón de bibiloteca que todos llevamos dentro. Hace de padre sustituto para el hijo de su vecina drogata, irresponsable y con una realmente pésima puntería vaginal. Los escritores de la serie también nos presentan las «virtudes» de Joe agigantadas en contraposición a los defectos de Beck (mentirosa, egocéntrica, adúltera, interesada) y de los otros personajes: Benji, el novio pijo, promíscuo, vago, homicida y cagabandurrias de Beck; Peach, la amiga aún más pija de Beck, al menos tan fría, falsa y manipuladora como Joe y lesbiencoñada en secreto de la rubísima y alelada Guinevere...
"Because he was the first strong enough to lift you. Now in his castle you understand Prince Charming and Bluebeard are the same man and you don't get a happy end unless you love both of him. Didn't you want this?"
Por supuesto, ninguno de los pecados de estos personajes hacen bueno a Joe que, por si no había quedado claro ya, es un puto psicópata con todas las características: encubre su naturaleza sociopática bajo un barniz de sensibilidad, encanto y cortesía, está más que informado de los códigos morales y legales pero solo los respetará mientras hacerlo le reporte algún beneficio, pretende desde el principio debilitar a Beck aislándola de su novio y sus amigas, se considera a sí mismo la víctima de sus propias malas decisiones o de las vacilaciones de Beck, no le importa recurrir a la mentira, el engaño y el crímen si con ello se acerca más a su objetivo, está  dispuesto a trasladar a terceros la responsabilidad de sus más reprobables actos, solo parece tener una ficción de pudor o remordimientos, carece de empatía hasta el punto de estar dispuesto a hacer lo que sea necesario para manipular a Beck hasta que le ame, tiene una elevadísima opinión de sí mismo, llegando a pensar que es el novio perfecto para Beck, que nadie sino él la conoce ni la entiende realmente, que nadie la quiere tanto como él...
Pero, a pesar de la evidencia, y de los delitos que Joe comete en pantalla, sigue habiendo espectadores que ven YOU y creen estar ante una hermosa historia de amor.

Lo cual no deja de ser irónico, pues YOU es precisamente la historia de un personaje, Joe, empeñado en malinterpetar lo que Beck hace y dice de manera que no arruine el cuento de hadas en el que nadie más que él cree y que en realidad nunca ha existido.

Joder. Hay días en que ni ganas de escribir tengo sobre la inflación de imbéciles que agusanan a la raza humana.
"Didn't you ask for it?
Didn't you ask for it?"

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